La Covid-19, el turismo mundial y las respuestas mezcladas
La Covid-19 afectó a más de 40 millones de personas con un millón 100 mil muertes cifras son abrumadoras, también para el turismo mundial.
Más de la mitad de los casos surgieron en Estados Unidos (8.154.935), India (7.550.273) y Brasil (5.235.344)., los tres países que son el epicentro actual de la pandemia.
Esta situación ha determinado el retorno a políticas de confinamiento mezcladas con aperturas económicas cautelosas en todas las regiones.
Una fórmula que se expande ya no como concepto sino como supervivencia influye en aperturas turísticas limitadas mientras se lucha por el retroceso de la pandemia.
El equilibrio entre el confinamiento y la apertura es complejo
Este pasado agosto cuando parecía cercana la restauración Organización Mundial del Turismo OMT anunció aperturas en 88 destinos.
En aquel momento la OMT reconoció que 115 destinos mantenían sus fronteras cerradas al turismo internacional.
Pronto quedó probado que ni las aperturas antes de tiempo ni el confinamiento hermético eran las respuestas, según estimaron expertos.
Octubre trajo los rebrotes que han reducido la velocidad del proceso de apertura aunque son detenerlo.
Europa ve resurgir la enfermedad y se mezclan las medidas.
Bélgica con más de 10,000 muertes determinó que los negocios como cafeterías y restaurantes cerraran por cuatro semanas.
A inicios de mes Bruselas incluía un toque de queda desde medianoche hasta las 500 de la mañana.
Suiza decidió los cierres de algunos lugares públicos como aeropuertos o estaciones de tren y prohibiciones de reuniones públicas de más de 15 personas.
Italia impuso restricciones especialmente en bares, restaurantes y actividades deportivas y de celebraciones.
Las restricciones en general buscan cuidadosamente, midiendo los temores a la epidemia una relación “adecuada” con las operaciones de la economía.
Una mezcla de medidas ocurre en la industria universal del ocio.
América Latina, sofocada económicamente, abre las puertas parcialmente.
Se trata de un subcontinente que es la región del mundo más afectada por el coronavirus, con unas 380.000 muertes.
La región del Caribe, con islas menos afectadas por la epidemia, el reinicio aplica “des confinamientos” limitados sin cierres económicos y sociales herméticos.
República Dominicana que ha reportado una caída histórica del turismo de más de un 60 por ciento a causa entró el 1 de octubre en una reapertura que se describe como total.
En Cuba los aeropuertos abrieron a los vuelos internacionales, aunque fue exceptuada La Habana por los casos activos que aún presenta.
El programa cubano plantea moverse hacia una nueva realidad que incluya una cuidadosa recuperación de la economía y en especial del turismo.
Otras islas caribeñas despliegan planes de arribos especiales sin abandonar pruebas médicas y aislamientos para evitar rebrotes.
Se extienden además las propuestas s internacionales
La OMT aplaude una reapertura gradual y “con responsabilidad ” y llama a la cooperación internacional para levantar la confianza de los viajeros.
Wellness Destiny Imagen de Engin Akyurt en Pixabay